La atmósfera del relato se asienta en la Checoslovaquia de los años 60. Un país convulsionado por la presión social ejercida por el régimen soviético al imponer la ideología socialista desde el año 1946. A partir de este periodo, se van desarrollando los acontecimientos conducidos por el protagonista Joska Svoboda, quien dará vida a un individuo volcado por el estudio y la observación sobre la compleja cultura de otros pueblos instalados en territorios alejados del entorno donde él habita. Un individuo, cuya peculiar personalidad está fuertemente unida a la profesión que ha elegido desde la época adolescente de estudiante, la cual consagrará definitivamente en el ámbito de la Universidad.De lo que no existe duda, es sobre la capacidad del protagonista para adaptarse a cualquier entorno dentro del vasto mundo que abarca su interés. Por muy beligerante que éste pudiera presentarse, es capaz de manejarse sin demasiada dificultad, integrándose en el grupo tribal como un sujeto más, completamente preparado para la cohabitación.