¿Es posible concebir el agua de mar como un valioso recurso en las operaciones mineras? Su utilización, ¿puede ser un factor determinante en el desarrollo sustentable de las zonas donde se generan extracciones industriales ligadas al campo? Este libro responde estas preguntas, pues compila una serie de ensayos dedicados a promover el uso del agua salada en la industria chilena. Este análisis se sostiene en las experiencias y estudios de una serie de expertos ligados al tema, que hoy enfrentan una situación de escasez en el norte chileno. Se proponen algunas soluciones en vista de que, tanto los recursos hídricos como los de suministro de energía, no dan abasto. Los autores ponen una alerta para nuestra industria minera: si no se busca una solución rápida y realizable, la falta de agua influirá negativamente en el desarrollo del sector.