Dragustín, era un Dragón tranquilo, bonachón y algo patoso que vivía feliz en su acogedora cueva. Bueno, feliz, feliz... No mucho. Resulta que Dragustín se aburría mucho. Llevaba muchos años haciendo las mismas cosas cada día: Levantarse a las 7,desayunar a las 8, leer el periódico a las 9, pasear a las 11, tomar el té a las cinco, ver su programa favorito de la tele a las 10 de la noche... ¡Necesitaba divertirse un poco para variar !
Una mañana, le llamó la atención un anucio en el periódico:" Se precisa actor para interpretar papel de dragón en una película ." Él no era actor, pensó, pero... ¿ Acaso no podía hacer el papel de dragón mucho mejor que cualquier actor humano?