Cuando al fin el deber profesional se impuso al deseo y decidió mantener las distancias, ella ignoraba que había provocado a un hombre al que le volvían loco los desafíos...
¿Cuánto podrá resistirse la indomable Daniela a la insistencia, a las tretas y a los encantos de Sergio?
Seguramente, más de lo que os gustaría?