Alguien se preguntará si se puede hacer un rápido recorrido por dos milenios de historia. Por eso, el autor afirma que, tal vez, más que de una historia, se trata de una reflexión sobre la vida y la identidad judías en la Diáspora desde la fecha mítica del año 70 d.C., cuando los romanos destruyeron el Segundo Templo, hasta nuestros días.