A través de la peripecia vital del próspero señor Dombey, cuya única ilusión es tener un hijo que le suceda al frente de la firma que dirige, Dickens traza una parábola del vigor de los sentimientos humanos, desde los más sublimes-como el amor incondicional de la hija de Dombey-hasta los más sórdidos, como la hipocresia y el orgullo. Los personajes de la novela, tan sutilmente perfilados, forman un microcosmos fascinante; las bulliciosas calles, el colorido de la vida comercial, los altos y los bajos barrios, un panorama diverso sometido a grandes cambios ( es la época del ferrocarril, de la nueva Inglaterra industrial), un mundo sufriente y esperanzado al que Dombey, en su desmesurado orgullo, da la espalda.
Dombey e Hijo se publicó por entregas mensuales entre octubre de 1846 y abril de 1848, y desde la primera entrega se convirtió en un rotundo éxito.