Nada podría parar a Arty, ni tan siquiera todas las sacerdotisas del amor del mundo entero. Arty quiere rescatar a su abuelo y para ello tendrá que vencer a las brujas y a sus armas de destrucción lasciva. Ninguna de las artimañas de las bellas y viciosas felinas conseguirá acabar con la determinación de Arty... ni tan siquiera el tener que luchar contra un crujidor embrujado, un monstruo con el corazón de piedra. ¿Sospechará nuestro héroe que es el infame demonio Djaul quien tira de los hilos y manipula a las sacerdotisas del amor? Evidentemente no, de lo contrario iría a Brakmar, a la ciudad de los adoradores de demonios.... donde torturan a su abuelo por no querer revelar sus secretos.