Las religiones no discuten ni cuestionan la existencia de Dios ya que él es la base misma de la razón de casi todas ellas. Algunos de los máximos exponentes de estas religiones, han considerado en sus escritos, las razones válidas y positivas de la existencia de un Ser Supremo.
No cabe la menor duda sobre la existencia de algunas personas seguidoras de estas religiones, quienes están absolutamente convencidas de sus principios y preceptos. Por esta razón y debido a su gran amor y altruismo, muy especialmente hacia los más necesitados, mantienen la fe durante toda su vida por encima de la razón.