La selección, a cargo de Irini Pitsaki, recoge cuentos de Eugenio Aranitsis, Sotiris Dimitriou, Misel Fais, Vassilis Gouroyannis, Menis Koumandareas, Dimitris Nollas, Siranna Sateli, Ersi Sotiropoulos, Antonis Sourounis y Yoryis Yatromanolakis.
La antología que aquí da comienzo, además de sumarse al acto de fe en la valía de un género de injusta marginalización, viene a cumplir otra misión igualmente importante: la de presentar a un grupo de excelentes autores portavoces de una literatura prácticamente desconocida en España, la literatura griega contemporánea. Por esta misma editorial, vimos publicado el interesante volumen de Pequeñas resistencias: antología del nuevo cuento español, en cuya contraportada leíamos: «Esta es una antología militante. Una antología que se manifiesta apasionadamente a favor del cuento». Y esta misma, la que el lector tiene en sus manos, además del cuento, es apasionadamente militante de la literatura griega. Los escritores de este país, por expresarse en un idioma minoritario, alejado de las principales redes de la industria editorial internacional, no logran ser leídos por un público más amplio que el de su propia nación. Como persona que vive la realidad editorial de cerca, a lo largo de los últimos años, he podido constatar la débil resonancia que tienen en el extranjero las voces de estos autores, que exclaman: «¡Escuchadnos, escuchadnos, tenemos mucho por decir!».