Rienda suelta al espíritu creativo.
La compleja paleta de colores pastel y las líneas sensuales de la obra de Alphonse Mucha (1860–1939) inauguraron un nuevo periodo artístico. Con sus trabajos, que destacan por su energía juvenil y sus diseños simplificados, Mucha revolucionó el mundo del arte.
Tras años de arduo trabajo anónimo, en 1895 el joven artista checo saltó repentinamente a la fama en París con un cartel para una obra de Sarah Bernhardt, la actriz más famosa de la época. En poco tiempo, «le style Mucha» pasó a ser el término utilizado para describir el nuevo espíritu que había transformado la ciudad. Mucha no sólo estaba comprometido con el «art nouveau», sino con un proyecto humano de mayor alcance: la expresión del espíritu creativo.
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