Crítica «El libro más divertido del mundo.»Evelyn WaughLas anécdotas registradas en este diario están llenas de inocencia y de la alegría de la vida de este personaje y su gusto por los juegos de palabras y los chistes. Es también, sin pretenderlo, un registro exacto de los modales, costumbres y experiencias de los londinenses de la época victoriana tardía. NordesiaConsigue que el lector mantenga la sonrisa durante toda la lectura, que no es poco y de paso, conocemos los usos y costumbres de los últimos años de la era victoriana. Dignidad y ridiculez son dos conceptos entremezclados en este libro y que dan como resultado el humor. Alfonso VázquezEste libro es un acerado retrato de la clase media británica, de sus ilusiones y frustraciones, de sus tardes abúlicas jugando al dominó o disfrutando como niños de juegos de palabras que harían enrojecer a un estudiante de parvulitos. Pero tal cúmulo de defectos, tanta mediocridad brillantemente exhibida es lo mejor de este libro y lo que consigue que miremos con ternura y simpatía a los señores Pooter, reflejo de una clase social dormida en los laureles. La opinión de MálagaCita«Salí de la habitación con silenciosa dignidad, pero me tropecé con el felpudo».«De nada te sirve hacerte el indignado cuando tienes el pelo lleno de perejil»Sinopsis«¿Por qué no habría de publicar mi diario? A menudo he visto memorias de personas de las que nunca había oído hablar, y no acierto a comprender ?por la mera razón de que yo no sea ?alguien?? por qué mi diario no habría de ser interesante. Solo lamento no haberlo comenzado cuando era joven.» Así empieza este divertidísimo relato de quince meses en la vida del señor Charles Pooter, un empleado de la City londinense, de clase media y con aspiraciones sociales.Por sus páginas irán apareciendo personajes inolvidables como su esposa Carrie, o su hijo Lupin, sus amigos el Sr. Cummings y el Sr. Gowing, y la novia de Lupin, Daisy Mutlar. Las anécdotas registradas en este diario están llenas de inocencia y de la alegría de la vida de este empleado medio y su gusto por los juegos de palabras y los chistes. Es también, sin pretenderlo, un registro exacto de los modales, costumbres y experiencias de los londinenses de la época victoriana tardía. Esta novela cómica, escrita por George Grossmith y su hermano Weedon, con ilustraciones de este último, apareció por primera vez en la revista Punch entre 1888 y 1889, y se imprimió en forma de libro en 1892. Se la considera una obra clásica del humor y nunca ha dejado de imprimirse.