La novela basada en el blog de éxito BLOGBACK MOUNTAIN, de elmundo.es
Las aventuras y desventuras de un gay de hoy en día en la gran ciudad: los amores, los desamores, el sexo, las discotecas, los amigos, los gimnasios, los gintónics y la purpurina. Martín Lobo tiene un objetivo que cumplir y nada ni nadie va a interponerse en su camino. Bueno, excepto, quizá, el último concierto de Madonna...
La crítica ha dicho:
«A pesar del jubiloso desfile de cuerpos en constante estado de arrebato, el libro es una novela de amor. Tras el paisaje de músculos y la correspondiente orgía de vergas incandescentes, de vez en vez aparece el amor, casi siempre en la oscuridad de la noche, cuando el protagonista esconde su cabeza bajo las sábanas para que el lector no vea su sonrojo.»
Carmen Rigalt
«En una sociedad todavía llena de máscaras y veladuras, Martín Lobo ha conectado con el lector medio, que aprecia sobre todo la sencillez y la sinceridad de este autor singular.»
Luis María Anson
«He flipado con Martín Lobo, con esa prosa entre la miel y el tripi, entre el martillo y la pluma, esa escritura que cuando le baja a las manos es ya una dentellada. Es valiente, visceral, peleón, extrañamente cálido, auténtico.»
Antonio Lucas
«Martín Lobo es vigoroso y desinhibido, una especie de Harvey Milk actualizado. Descarado, nada complaciente, políticamente incorrecto, provocativo y, a fin de cuentas, audaz y a la vez cómplice.»
Eduardo Mendicutti
«Leer a Martín Lobo es un viaje a la pura vida. A las pasiones de las que no hay que protegerse ni aun cuando hieren. A los errores. A todas las canciones que caben en un iPod. A los tugurios de los que se sale con la protección de unas gafas negras. A las madrugadas melancólicas en las que uno se siente sucio y culpable, muy solo, porque en la ducha aún está el rastro de espuma de quien se acaba de marchar para siempre. Alo que da bronca y a lo que da gusto.»
David Gistau
«Martín Lobo es valiente, entretenido y enriquecedor. Tiene el reconocimiento de cuantos hemos disfrutado y participado de ese espacio de libertad de conciencia y sexual que nos abrió con valentía, rigor y desenfado. Con su blog ha movido montañas.»
Pedro Zerolo