La vida de Mendleman, futuro padre, se ve trastornada cuando descubre que no puede seguir trabajando de lo que mejor sabe hacer: fabricar alfombras artesanalmente. Mendleman lleva su carro al mercado para descubrir que la tienda a la que solía vender sus manufacturas ha cambiado de propietario y que el nuevo sólo se abastece de mercancía barata y de baja calidad. El único recurso que le queda es vender sus alfombras por una miseria a un nuevo emporio, el gran hipermercado de su tiempo.
James Sturm nos ofrece un meditado y hermoso retrato de la Europa del Este a principios del siglo XX, dando vida al ajetreo de un mercado en los albores de la revolución industrial. Día de mercado es una historia intemporal sobre la forma en que las fuerzas económicas y sociales pueden afectar la vida de una persona