La intención de Charles-Roux, que escribió este texto a los pocos años de morir Coco Chanel, fue ir más allá de la leyenda, aportando minuciosos datos biográficos y, a la vez, ahondando en sus mentiras y contradicciones. Plasmada en toda su complejidad, Coco Chanel suscita una mezcla de admiración y rechazo, pero nunca indiferencia.