¿Es verdad que ha terminado la crisis? ¿Qué secuelas ha dejado en el país? ¿Inflaremos otra burbuja como la del ladrillo? ¿Está España condenada a vivir del turismo? ¿Qué consecuencias tendrá el Brexit para los ciudadanos europeos? ¿Qué efectos está provocando la presidencia de Donald Trump en el orden económico mundial? ¿Qué camino le queda al estado del bienestar?
En junio de 2012 España fue rescatada por nuestros socios europeos y el Fondo Monetario Internacional. Nos encontrábamos en uno de los momentos económicos más convulsos de los últimos cuarenta años y la situación fue adquiriendo tintes sombríos en los meses posteriores, en los que alcanzamos la cifra de 6 millones de desempleados y un 27% de tasa de paro.
Alarmado por la gravedad de la situación, en mayo de 2013 publiqué mi primer libro, Hay vida después de la crisis, con el propósito de contribuir al debate y explicar las causas de esta maldita crisis que tan grandes cicatrices ha dejado: ha elevado el paro de larga duración hasta el punto que, en muchos casos, se ha convertido en pobreza; ofrece trabajos precarios y escasos a nuestros jóvenes mientras la cesta de la compra y las facturas de bienes básicos, como la electricidad, se han disparado.
Vivimos un momento crítico en el que, de nuevo, veo con preocupación el futuro y discrepo del mensaje oficialista. Por esta razón, me parece necesario regresar a las propuestas que nos lleven a recuperar la dignidad de este país y de sus ciudadanos. No resulta sencillo sostener que hay vida después de la crisis, pero estoy seguro de que construir la España del bienestar es posible.
Recorramos juntos el camino de la indignación a la esperanza.
José Carlos Díez