Argumento de De Detroit a Triana
En plenos años 90, llega a la Sevilla post-Expo del 92, Ken, hasta entonces el típico estudiante americano, que vive con su típica familia americana en la típica gran casa de un barrio residencial y cuya vida ha seguido paso a paso y punto por punto todos los tópicos que estamos acostumbrados a ver en las típicas películas americanas. Ya en Sevilla, la ciudad más típico-tópica de España, Ken se aloja con una familia más sevillana que la Giralda e inicia un curso acelerado de españolismo, andalucismo y sevillanismo que solo podía acabar de dos maneras: a) corriendo sin parar de vuelta a los Estados Unidos o b) cayendo fulminado por la idiosincrasia bética. Ken se decidió por la segunda vía, pero no sin antes hacer un máster en procesiones de Semana Santa, bodas gitanas y humor de la calle que resolvió cum laude, convirtiéndose él mismo en más trianero que muchos que han nacido a la sombra del puente del Guadalquivir.1