Las dos famosas y grandilocuentes afirmaciones de Aznar, «La guerra civil ha terminado» (pronunciada la noche de la mayoría absoluta del año 2000, tras su triunfo), y la que se refería a que iba a «sacar a España del rincón de la historia» (pronunciada dos años después, al decidir engrosar la coalición angloamericana que invadió Iraq), jalonan la presente historia.
Muchos son los interrogantes que suscita su lectura: ¿Ha quedado algo para la gran historia de España de lo realizado por Aznar? ¿Por qué el presidente del gobierno, que tuvo cuatro años extraordinarios para impulsar el desarrollo económico español, decidió subirse al carro de Bush y Blair, mimetizarse con sus posturas belicistas y poner en peligro su legado político y el futuro de su partido? ¿Por qué un dirigente político tan pragmático fue capaz de perder el sentido de la realidad cuando los oropeles del poder y la adulación hicieron mella en su personalidad? ¿Hubiera sido posible la llegada al gobierno de Zapatero sin las bombas del 11-M? Y, finalmente, ¿está acabado Aznar? ¿Ha periclitado definitivamente su carrera política? ¿Tiene alguna posibilidad de retomar las riendas del PP y disputar el poder a sus encarnizados adversarios socialistas y nacionalistas?
II. Un día de aquel "tiempo"
III. Cuando el fundador eligió donde podía
IV. Amigos peligrosos y con suerte
V. Remando en aguas turbulentas
VI. El perfil del monje
VII. El perfil de la zarina
VIII. Cuando en España se hablaba catalán en la intimidad
IX. Del hacha y de la serpiente
X. Cuando el mundo hablaba de milagro
XI. Cuando el profesor invisible se convirtió en el cerebro del milagro
XII. Capitanes domables
XIII. El espíritu de las mariposas
XIV. El rebufo regio
XV. La última ratio: el laberinto iraquí
XVI. El secreto de la esfinge: la sucesión
XVII. Habla el César
XVIII. Rumbo a lo desconocido: La pasión por la derrota