Israel Pintor arriesga su escritura a la autoficción. Mezcla un Yo despegado, construido para efecto del texto, con un Yo inevitable y propio, expositivo. Nos muestra su navegar por el consciente y el subconsciente, por el deseo y el deber ser, por el español de España y el español de México, por su búsqueda de un lugar en el mundo. Lo que descubrimos, junto a él, de camino en su prosa que no permite la vuelta atrás, es el lugar inesperado desde dónde nos va a narrar. Esa exploración, en formas gramaticales, indagaciones psicológicas y honestidad, es la que nos revela, poco a poco, en cada texto, qué hay de novela, y qué de cuento, en este confluir de géneros, variaciones lingüísticas y técnicas literarias. Israel Pintor es un escritor que no teme ser escritor y que tiene las herramientas para erigir una voz propia. Cristina Rascón