Cuentos de Ise, obra anónima elaborada seguramente por uno o más autores a partir de una antología de Ariwara no Narihira, una de las grandes voces de la poesía japonesa de todos los tiempos, adoptó su forma actual durante la primera mitad del siglo x y fue considerada un referente inexcusable de las letras de aquel país hasta la revolución Meiji. Pertenece al género denominado uta-monogatari «cuentos con poemas», en el que los pasajes en prosa articulan sucintas narraciones en torno a la composición, muchas veces ficticia, de uno o más poemas, y no sólo resulta ejemplar por la calidad de los poemas en sí, sino también por la elegancia y sensibilidad del hombre que los protagoniza, modelo perfecto de poeta, amante y cortesano.