Tal vez se visite la zona para probar las perfectas olas de color azul zafiro que rompen a derecha e izquierda a lo largo de toda la costa, o puede que solo para tumbarse en una inmaculada franja de arena y tomar el sol. De día, quizá se enfile por carreteras accidentadas, vadeen ríos y asciendan montañas con asombrosas vistas de la costa, y de noche, tal vez se espíe el desove de las tortugas marinas o se tome un baño en el Pacífico. En cualquier caso, entre aventura y aventura lo que no faltará serán hoteles-boutique, exquisitos restaurantes o spas complacientes para cuidar y nutrir el cuerpo y el alma. Tanto si se buscan emociones como tranquilidad, la península de Nicoya cumple las expectativas. Aquí sí que los días se desvanecen con la brisa marina, demasiado deprisa.
? Sumergirse para ver tortugas marinas, mantas y tiburones toro en la playa del Coco.
? Disfrutar de las olas matutinas y las asanas vespertinas en Nosara.
? Maravillarse con la madre naturaleza en el Refugio Nacional de Fauna Silvestre Ostional, durante la arribada, la llegada en masa de tortugas golfinas que van a desovar.
? Mapas.
? Transporte.
Incluye: Playa del Coco, Playa Hermosa, Bahía Potrero, Playa Grande, Playa Tamarindo, Nicoya, Nosara y alrededores, Playa Sámara, Playa Carrillo, Islita y alrededores, Mal País y Santa Teresa, Montezuma.