Desde los tiempos primitivos, al ser humano parece haberse sentido atraído por el misterio y lo aparentemente inexplicable. Todo cuanto se consideraba que carecía de explicación lógica -y que, en la mayoría de los casos, era simplemente ignorancia- pasaba a las regiones enigmáticas del mundo fantástico de lo esotérico. En realidad, incluso las religiones se sustentan en gran medida con base en los mismos materiales que configuran los sueños y elaboran sus ritos envueltos en el misterio y la fe. ¿Qué sería del hombre sin sus sueños, sin sus temores? ¿Qué sería del hombre si no se sumiera en las amenazadoras tinieblas de lo desconocido? Incluso los grandes científicos modernos no han podido eludir dejarse atrapar por las garras del misterio y consagran su vida a idear fórmulas matemáticas que nos conducen a los primeros segundos del big-bang. ¿Pero acaso se sabe realmente lo que ocurrió para que se pusiera en marcha nuestro universo? El libro Cosmos y Pirámides, de M. Arturo Mengotti, se mueve con agilidad en esa fascinante y nebulosa zona que mezcla los conocimientos científicos más modernos con las creencias y supersticiones más antiguas. No intenta explicar o destruir tales creencias y supersticiones, sólo las pone de relieve y compara la civilización china con la maya, la egipcia o con la antigua de la India, proporcionándonos datos curiosos y, ciertamente, de difícil explicación. No pisotea nuestros sueños. Nos hace pensar. Yo, que soy tan poco propenso a creer en cosas increíbles y en fenómenos inexplicables, confieso que he leído con interés y curiosidad el texto de Mengotti. Aunque mi educación universitaria sólo me permite creer en lo científicamente demostrable, reconozco que lo inexplicable nunca dejará de ser emocionante. Pienso que pronto veremos nuevas obras de este autor que nos harán seguir reflexionando sobre los misterios que siempre nos han rodeado. Santiago Moncada Mercadal Dramaturgo y Presidente de la Fundación de Autores.