El proyecto, elegido para representar a México en la 55 Bienal de Venecia, se da a conocer a todo el público en una edición bilingüe (español-inglés) que contiene un ensayo escrito por la curadora Itala Schmelz y textos de Osvaldo Sánchez, Karla Jasso, María Paz Amaro y el mismo Ariel Guzik; además de materiales inéditos que nos acercan al proceso creativo del artista (diagramas, bocetos y anotaciones).
El contenido se enriquece con numerosas imágenes que muestran el trabajo de Guzik y su equipo, así como la compleja producción de cada una de sus máquinas sonoras. Se trata de una gran bitácora que registra más de tres décadas de constante producción.