Este libro os va a acompañar en muchos momentos; algunos malos, otros no tanto. Así que espero que muchas piezas mías puedan encajar en vuestras vidas, en vuestras experiencias. Todo conforma un puzle y sé que me expongo a muchas críticas. Gracias de antemano, las recibiré como se merecen.
Tan sólo pretendo hacer reír, o tal vez, hacer llorar. Nuestras vidas se componen de piezas que forman un gran puzle en el que todo encaja, o en el que encontramos piezas disonantes.
Yo encontré una vez una pieza que me llevó a Monte Perdido. Y allí toqué el cielo. Y allí vi un ángel. Desde entonces creo en ellos. Sobre todo si sonríen, porque entonces la felicidad llega de su mano y todo se olvida.
Aquí os dejo mis aventuras; sólo algunas de ellas y las acompañan todo un conjunto de pensamientos interiores y de sentimientos encontrados que, espero, os muestren a este pequeño loco que os habla y os hace de guía.
¿Me acompañáis en esta aventura?