Estos grandes temas típicamente agustinianos parecen adquirir líneas, colores y relieves insospechados a la luz de esta Verdad que San Agustín identifica resueltamente con Dios. De esta manera, toda la humanidad de Agustín, su pensamiento y su vida, permanece abierta y transparente ante la Gracia y la Verdad.
Del prólogo de Josep Maria Rovira Belloso, catedrático de la Facultad de Teología de Catalunya