En esa circunstancia, el ciudadano necesita orientarse para resolver los problemas que surgen en las relaciones con su comunidad de vecinos.
A la atención de esa demanda responde el libro, con dos objetivos principales: por una parte, colaborar a dotar de racionalidad a una materia tan propicia al apasionamiento; por otra, ofrecer fórmulas de encuentro en que la satisfacción del derecho propio no impida la percepción y el respeto del ajeno.