Si estás triste, si tienes un momento de bajón, o si las mañanas en las que te cuesta afrontar el día se suceden más de la cuenta, Cómo ser feliz (y no perder la esperanza) te ayudará a levantar cabeza. Ningún libro puede resolver todos tus problemas, pero este te enseñará a ver las cosas desde una perspectiva más creativa. No te dará las respuestas, sino que permitirá que las encuentres tú solo y redescubras así lo positivo del día a día. A través de reflexiones, ideas y ejercicios sorprendentes y sencillos, sus páginas te brindarán consuelo, momentos entretenidos y la esperanza de un nuevo principio.