En Colorín los más pequeños juegan durante todo el día, los mayores se divierten trabajando, los pájaros y los grillos ponen música en el ambiente y las flores inundan todo con su olor y hacen que sea un placer respirar, es un sitio muy especial.
Los pequeños esperan con mucha ilusión que llegue el día en que puedan ir a la escuela para comenzar sus clases donde se preparan para convertirse en aprendices de Hadas o aprendices de Magos. Aunque tienen mucho tiempo para aprender, juegan todo el día imaginando que ya son Hadas o Magos.
Un día nació un niño muy especial y le pusieron por nombre Colorado...