El chino es un pueblo amante de los proverbios, de los aforismos. Desde la tradición popular anónima hasta la complejidad estilística de los poetas taoístas, es un arte que se desarrolla a partir de la dinastía Sung y alcanza su cumbre en los siglos XVI y XVII.
Los cien proverbios seleccionados en este volumen son del tipo más popular, y muchos de ellos han sido extraídos de fuentes desconocidas, donde cada línea debe tener una melodía y una forma de expresión independiente del pensamiento.