Tras regresar a México, Maria Venegas reconstruye con los recuerdos de su padre una vida marcada por un pasado doloroso, violento y enardecido.
Con una prosa sobria y fascinante, Chaleco antibalas es el reconocimiento de Maria Venegas ante el difícil legado de su padre.
Pero helo ahí, parado frente a la barra: un pie sobre el tubo de cromo, en el que encaja el tacón de su bota vaquera, con una cerveza en la mano y los músicos tocando un corrido sólo para él.
Tras catorce años de ausencia, Maria Venegas regresa a México, desde Estados Unidos, para visitar a su padre José en la hacienda donde él nació. Mientras pasan juntos una temporada, él comparte los recuerdos de su vida. Es así como Venegas consiguen reconstruir el pasado doloroso, violento y enardecido de su padre: desde la última conversación que sostuvieron antes de que él fuera extraditado a México por asesinato, abandonándola a ella y a su familia en Chicago, hasta el orgullo que sintió la madre de José cuando su hijo de sólo doce años mata por primera vez.
Moviéndose entre México y Nueva York, entre pasado y presente, Maria Venegas reconoce su propia historia y la de José, al tiempo que una cercanía y un entendimiento por las acciones de ambos surgen entre ellos.
La crítica ha dicho:
"Con una prosa multicolor y de distintos matices, [Venegas] transforma el pasado familiar en el retrato de un renegado que vivió su vida al límite entre los hechos y el mito" - The New Yorker