Argumento de Centralización, Descentralización y Autonomía en la España Constitucional
Encuadernación: Rústica
Colección: Historia del Derecho ; 25
Este libro recorre el camino de la configuración de las realidades jurídico-políticas que esconden los vocablos centralización, descentralización y autonomía desde los albores del siglo XIX hasta el estallido de la Guerra civil en 1936, explicando en qué ámbitos aparecieron, cuándo, cómo y el léxico político-jurídico empleado para su designación. En concreto, fue en las esferas del régimen local, de la organización territorial del Estado y de la instrucción pública, especialmente la universitaria, donde se fueron gestando y perfilando estos conceptos. Si hasta 1868 triunfan las tendencias centrípetas, tras esa fecha se manifiestan las fuerzas centrífugas: el malogrado intento de 1873 de cambiar la forma de organización política del Estado, la consecución de una regulación más descentralizada del régimen local en las Leyes de 1870 y el afán de instaurar la libertad de enseñanza. Desde finales del siglo XIX y hasta la guerra civil se muestran en los intentos de lograr una mayor descentralización administrativa y, sobre todo, al compás de las reclamaciones regionalistas, en el deseo de conseguir una descentralización política autonomista, que culmina con el Estado integral de la Segunda República. Fue a partir de 1868 cuando se generalizó la utilización del vocablo autonomía.0I. Primeros y vacilantes pasos (1808-1868)
1. Punto de partida: mitificación liberal de las libertades municipales medievales.
2. El primer liberalismo (Cádiz y el Trienio): la gestación de un Estado unitario con una Administración imperfectamente centralizada.
3. El último absolutismo. Reformismo administrativo fernandino.
4. El Liberalismo doctrinario isabelino: apogeo del Estado unitario y de la centralización administrativa y sucesivos intentos fracasados de descentralización administrativa.
II. La consolidación (1868-1936)
5. El Liberalismo democrático del Sexenio revolucionario. Gran fracaso de la aspiración a constituir un Estado políticamente descentralizado y culminación parcial de la descentralización administrativa.
6. De nuevo el Liberalismo doctrinario en la Restauración: la vuelta a la centralización y crecientes reivindicaciones descentralizadoras y autonomistas.
7. Otra vez el Liberalismo democrático durante la Segunda República: la primera plasmación truncada de la autonomía y descentralización política.