Hay una finísima línea apenas visible que delimita el mundo conocido, amable y cotidiano del Otro Lado. Es allí donde cordura y locura se divierten confundiéndose, las pesadillas inimaginadas se tornan realidad y todos los caminos esconden amenazas imposibles. Pero a veces los Demonios más terroríficos nos acompañan a ambos lados de las dos realidades y estos son quizás, los más despiadados y sedientos. El ego, las propias debilidades, nuestros secretos más ocultos, la envidia, la avaricia, nuestros inconfesables pecados. Este es el hilo con el cual el autor ha cosido un mundo que se desgrana a través de sus páginas confundiendo y atrapando al propio lector, convirtiéndolo en protagonista activo de este incierto viaje a lo ignoto.