?Los que, contra viento y marea, ejercemos el tan señalado oficio de escritor, hacemos que las letras y las palabras, mezcladas entre sí, sirvan de sustento para la construcción de un mundo maravilloso, donde, los sueños tenidos por vivir, terminan por convertirse en esa realidad extraordinaria, que, aún no pretendiéndola, nos lleva a tocar el cielo con la piel de los sentidos, mientras a un mismo tiempo, utilizando una mano o la otra, vamos pasando página tras página en el libro de nuestras vivencias de amor, conscientes, en el fondo, de que en una de ellas, la llamada última, existe esa palabra mágica que nunca se escribe, y con la que dejamos de ser ahora para luego ser después?.
Gabriel Trujillo Hernández
*Fragmento de la novela titulada: ?En el último vagón del tren de los sueños?.