«La poesía de Saravia, como él mismo, se llena de sabiduría e ingenuidad, compromiso con la vida y derrame absoluto de imaginación comprometida con el lenguaje y las transgresiones de existencia necesarias para la creación de un mundo propio y emocionante». Jesús Hilario Tundidor
En Carta blanca, su cuarto libro, Rafael Saravia sigue y ensancha el camino que expone su intemperie afectiva en busca de las señales de la conciencia. Un itinerario que se inicia en la autointerrogación, intelectual y corpórea «La genética nos conduce al hombre que conversaba con la tierra [.] esa que concierne al agricultor de esperanzas», continúa con el cuestionamiento de los vínculos amorosos «Sólo como presa soy consciente de ti», y finalmente vuelca su mirada sobre el mundo, en su calidad civil «Los herederos del juego quieren vender piolets / a los lectores del Manifiesto por un arte revolucionario independiente / y la nieve ya no limpia los fracasos cosidos al pulóver de los embargados». En palabras de Víktor Gómez, «Lo genético es desbordado por la intensidad de la experiencia vital y la toma de conciencia frente al otro, sea amante, sea pueblo, sea un tiempo herido por sanar y resarcir».
Rafael Saravia, fundador del Club Cultural Leteo y Ediciones Leteo, realiza una intensa labor como gestor cultural y editor, de la que se han derivado los reconocidos premios Leteo. En el ámbito literario, preparó y prologó la edición del libro homenaje a Antonio Gamoneda El río de los amigos (Calambur, 2009), así como, junto a Jocelyn Pantoja, Barcos sobre el agua natal. Poesía hispanoamericana desde el siglo XXI (2012). Ha participado en diversas antologías y ha publicado los libros de poemas Pequeñas conversaciones (2001, 2009), Desprovisto de esencias (2008) y Llorar lo alegre (2011).