En 1981, con Abacab, Genesis dejó atrás su imagen de grupo de elepés, se distanció de los postulados del pop sinfónico y pasó a ser un grupo con canciones de éxito. Genesis e Invisible Touch continuaron esta tendencia y, tras cinco años sin sacar un disco, la fantástica acogida de We Can`t Dance confirmó que habían adquirido el estatus de banda legendaria. Legendaria sí, pero inmutable definitivamente no: poco después, Phil Collins abandonó la formación para dedicarse de lleno a su carrera en solitario y Calling All Stations se grabó sin su presencia.
Este segundo volumen de canciones de Genesis incluye las letras originales y su traducción al castellano de estos cinco elepés publicados entre 1981 y 1997.