En la Hondonada de las Hadas reina la calma. No hay hadas revoloteando por la pradera ni jugando en la laguna. De repente, se oye un leve susurro. Campanilla vuela sigilosamente sobre un jardín de flores, se acerca a lo alto de un tulipán y sonríe. Rosetta aparece entre los pétalos. ¡Están jugando al escondite y le toca parar a Campanilla! Pero todavía le falta encontrar al resto: Rani y Bess, Rettle y Fira, Dulcie y Terence, Silvermist, Iridessa y Fawn. Beck es un torbellino y no puede estarse quieta durante mucho rato; seguro que será fácil de encontrar. Pero en esta ocasión las demás hadas tendrán que ayudar a Campanilla a buscar a Beck. ¿Dónde se habrá metido?