Pero el arte egipcio, como todo arte, es humano, y por ello tiene su lógica. Los egipcios constituían un pueblo alegre, que quería que su vida en el más allá fuera como la que disfrutaban aquí.
Desvelar esa lógica, adentrándose en los vericuetos del deslumbrante arte que desarrollaron los egipcios hace miles de años, es el propósito, pues, de este libro.
Miguel Hermoso Cuesta es doctor en Historia del Arte y profesor asociado del Departamento de Historia del Arte de la Universidad de Zaragoza.
Ha recibido distintos premios, como el Premio Extraordinario de Licenciatura y el Premio Extraordinario de Doctorado en la Universidad de Zaragoza.