Encuadernación: Rústica
Colección: Best seller ; 874
Una gran novela de formación, auténtica y vibrante sobre la fragilidad y la fuerza de la adolescencia.
Entre mensajes de móvil, deberes, pósters, canciones, partidos, motos, miradas y sonrisas se encuentra Leo, un joven inmerso en el torbellino de la adolescencia.
Leo tiene un enemigo: el color blanco. Porque para Leo todas las emociones tienen un color, y el blanco es la ausencia, la soledad y la pérdida. El azul es el color de la amistad y el de los ojos de Silvia, su mejor amiga, leal y serena, su apoyo constante. El rojo, en cambio, es el color del amor, de la pasión, de la vida, y el color de los cabellos de Beatrice.
Cuando Leo descubre que Beatrice está enferma y que su enfermedad está relacionada con ese blanco que tanto le asusta, deberá buscar dentro de sí mismo, sangrar y renacer para entender que los sueños no tienen fin y que siempre hay que encontrar el coraje para creer en algo más grande.