Argumento de Bizancio
Tras la consagración de Constantinopla como ciudad el año 330, da comienzo el Imperio bizantino, cuyos primeros siglos, para muchos historiadores, no son sino una prolongación del mundo tardo-antiguo. Durante un milenio la lengua, las estructuras sociales, la economía, el derecho, la concepción del mundo, los géneros literarios, la filosofía, la teología, la religiosidad, la ciencia, la vida privada y otros aspectos de esta civilización sufren transformaciones apreciables sin dejar de ser reconocible en ocasiones su original dependencia del paradigma antiguo y tardo-antiguo. Tildada por muchos como la historia de una decadencia, no cabe duda de que Bizancio representa un estado del pensamiento y la cultura sensiblemente diferente de su punto de partida. Relacionado estrechamente con el islam, a quien hizo llegar tempranamente a través del siríaco la cultura antigua, Bizancio cristianizó el mundo eslavo y le introdujo en la Historia occidental. Su influencia sobre Europa es, pues, notable en muy diversos ámbitos, incluso una vez desaparecido como Estado cristiano en el 1453.0