Las dos teorías de la relatividad ocupan el puesto de honor, pero no se olvidan aspectos menos conocidos del trabajo de Einstein, de manera que se explica cómo su investigación ayudó a la invención del láser, cómo patentó un tipo único de frigorífico, cómo demostró la existencia de los átomos y cómo invirtió sus últimos años en una búsqueda prematura de la «teoría del todo». Todo ello en medio de una vida privada agitada, dos matrimonios, una hija ilegítima, la escasez de recursos durante la primera guerra mundial, la enfermedad y la huida a Estados Unidos a causa del ascenso al poder de los nazis.