Al trazar las líneas de conexión entre la fotografía en sí y sus interpretaciones históricas y teóricas, este libro se transforma de inmediato en una herramienta útil no sólo para quien desea abordar la fotografía como una cuestión crítica, sino para cualquier persona preocupada por saber cuáles son nuestras motivaciones para conservar, de manera artificial, nuestros más íntimos fragmentos de vida.