La provincia de Guadalajara está tapizada por ese mosaico de teselas heterogéneas pero que, al fin, conforman una imagen coherente. Su paisaje esconde un organismo vivo que se manifiesta con fortaleza, unas veces, y en el que aflora, en otras, su debilidad. Ese dibujo, en su conjunto, pertenece a un único ser, tiene una clara personalidad y representa, en suma, el devenir de sus tierras y la comunidad humana que las habita.
En este Atlas queda estampado en sus mapas, croquis, ortoimágenes, fotogramas aéreos y fotografías convencionales ese valioso patrimonio paisajístico de la provincia de Guadalajara que aúna en indisoluble trabazón naturaleza y cultura. Un texto sencillo quiere acompañar al lector en su apasionante viaje por vegas, campiñas, alcarrias, parameras y sierras, donde abrirá sus ojos con asombro ante paisajes que guardará para siempre en su memoria.