La astrología permite obtener dones de valor eterno: percepción clara, conocimiento del significado de la vida, mayor tolerancia y más acentuada comprensión del prójimo.
Esta obra tiene en gran medida esa finalidad, pero con la inclusión de otros dos elementos fundamentales: el karma y la reencarnación.
Tal interpretación da por resultado un texto realmente inspirado e iluminador, en el que no está ausente un actualizado material acerca de un planeta enigmático y sugestivo: Plutón.
La autora pone ante nuestra vista una asombrosa perspectiva espiritual, cuya percepción depende del inteligente uso de la Astrología como un mapa de caminos, el cual nos permite orientarnos debidamente y plasmar un modo de vida más significativo y satisfactorio.
Con estricta justicia, puede considerarse a Isabel Hickey como una de las más brillantes precursoras y difusoras de la Astrología Espiritual de nuestro tiempo. Su dominio del tema quedó manifiesto a través de su extensa labor como conferencista y docente. Sus enseñanzas metafísicas transformaron a miles de personas. Ella creyó en la reencarnación y se dedicó a ayudar a los demás para que actuasen en armonía con las leyes universales que guían nuestra vida.