En este libro que interesará a quienes consideran que la escuela es una institución donde, además de competencias y contenidos se aprenden formas de ser, se exploran algunas experiencias y espacios de relación que tienen lugar en cuatro escuelas primarias de la ciudad de Barcelona. Estos estudios de caso ofrecen indicios de cómo las subjetividades de los niños y las niñas se viven y proyectan en los diferentes escenarios de la escuela, así como en las representaciones de la infancia que se derivan de los discursos y las prácticas escolares.