Argumento de Antología de Textos Libertinos Franceses del Siglo Xvii
Durante los primeros años veinte del siglo XVII suena con fuerza en Francia una terrible e indignada voz de alarma: la corte de París se halla infestada desde finales del siglo anterior de toda suerte de blasfemos, licenciosos y ateístas. Todos ellos quedan rápidamente agrupados bajo la categoría de libertinos, término peyorativo con el que son designados quienes consagran sus energías intelectuales a un riguroso cuestionamiento del universo religioso, político y ético intensamente cristiano que determina el normal transcurrir del siglo. Con el libertinismo erudito, movimiento filosófico de pleno derecho cuyo estudio se ha revelado esencial para comprender los grandes envites del XVII, cobra carta de naturaleza una razón crítica que somete a su imperio todos los dominios del pensamiento, especialmente la teología, la moral y la filosofía recibidas, y que rechaza toda regla exterior y todo principio de autoridad, propugnando una libertad filosófica sin trabas de ningún tipo, especialmente de tipo religioso. Esta razón crítica se materializará en un tenaz esfuerzo por construir una ética autónoma, sin hipotecas teológicas o dogmáticas, y por analizar rigurosamente la esfera de lo sagrado, cuestionando su papel fundamentador en los campos de la filosofía, la política, la acción y de los modos de vida de los hombres. Semejante esfuerzo liberador será perpetuado por los filósofos y ensayistas del siglo de las Luces, constituyéndose así en la verdadera semilla de la que brotará el pensamiento ilustrado francés del siglo XVIII.0