De esta forma se ofrece una alternativa a la teoría de la evolución generalmente admitida, según la cual se debería atribuir el origen de toda novedad a mutaciones aleatorias, de las que serían seleccionadas las ventajosas para la especie. Al criticar el excesivo simplismo de esta teoría, Piaget se enfrenta al papel dominante que los neo- darwinianos conceden al azar. De aquí el carácter polémico de su hipótesis, en el terreno científico y en el filosófico.