Argumento de A las Puertas de Leningrado
El frente ruso era el último destino al que un soldado alemán deseaba ser enviado. Aunque en el verano de 1941 parecía que la invasión de la Unión Soviética iba a ser tan rápida y fácil como la de Polonia o Francia,
las tropas germanas pronto comprendieron que esa nueva campaña no iba a resultar tan plácida. Los caminos intransitables por el barro, el inagotable aluvión de efectivos del Ejército Rojo, la presencia de partisanos en la retaguardia, el equipo inadecuado y las gélidas temperaturas invernales hicieron que la lucha en el este se convirtiera en un infierno.
William Lubbeck fue un joven soldado que sufrió esa pesadilla en el frente de Leningrado, durante cuatro largos años. Su extraordinario testimonio, recogido en estas páginas, describe de forma fiel y emotiva
los padecimientos a los que tuvo que enfrentarse: el miedo, el hambre, el frío, la añoranza de los seres queridos y la muerte de muchos de sus compañeros. Afortunadamente, él sí pudo sobrevivir para contarlo.0