SIPNOSIS Cuando mi hijo comenzó a darme respuestas optimistas y a la vez tan cómicas de como resolver los problemas a los que se enfrentaba día a día, comprendí que es mejor ver la vida desde sus ojos, los de un niño. Inocente, con suficiente valor para hacer de la rutina diaria la más divertida y emocionante de todas las aventuras. Todos a la selva.