Argumento de A Galope Tendido.
A GALOPE TENDIDO ¿Quién no ha galopado nunca a lomos de velocísimos caballos por las praderas abiertas desafiando a flechas y balas? ¿Quién no ha montado cimarrones salvajes o potros indómitos, manteniendo a duras penas el equilibrio? ¿Quién no ha trotado orgulloso sobre elegantes y repeinados corceles árabes o andaluces? ¿Quién no ha sido jinete entre indios y vaqueros o perseguido a cuatreros despiadados? ¿Quién no ha soñado con bellos, estilizados y mágicos unicornios? Encaramados a una escoba, sobre las piernas de nuestros abuelos, a hombros de nuestros padres, en el regazo de nuestras madres, todos hemos cabalgado cual si fuéramos el mejor jinete, el más diestro auriga o el más hábil domador de caballos. Cualquier niño, y todo adulto que lo fue, sabe de qué estamos hablando. Fernando Martos nos recrea en este delicioso libro uno de los más entrañables recuerdos de la infancia.0